Para empezar quiero compartiros lo que fue mi experiencia a mi regreso de Guatemala hace algo más de 10 años.
En la primera entrevista con el obispo renuncié a una pastoral parroquial y opté por continuar en una pastoral misionera, en salida, tratando de abrirme camino en un ambiente desconocido aunque se trataba de mi ciudad. Me incorporé a una comunidad cristiana de base que conocía bien desde muchos años y me comprometí con el Voluntariado de dos ong’s., lo que me posibilitó el contacto con personas de muy distintos ambientes y realidades desconocidas para mi de la vida de mi ciudad. Esto me condujo a dos realidades que en la actualidad vitalizan mi vida como ciudadano, mi fe en Jesús y mi compromiso por el Reino: 1) Se amplió mi familia. Comparto casa, mesa, alegrías, dificultades, estrecheces y proyectos con una familia de Senegal integrada por un matrimonio y tres hijos de 16, 4 y 1 año y medio y que dejaron en Senegal otros dos hijos de 14 y 12 años. Compartimos también la fe y la confianza en Dios que ellos llaman Allah y yo, sencillamente, Padre.Un gran regalo inesperado para mí. Y 2) Se concretó mi opción por los pobres en este momento con la preocupación y relación con las personas migrantes, su mundo, sus rostros, sus historias, sus sueños, su vía-crucis… lo que me llevó al compromiso con el Círculo de Silencio.
Leer el documento completo en PDF: Retiro con la Comunitat de Jesús 22 enero 2022. Antonio SICILIA VELASCO es