“Si deseamos realmente conseguir paz en el mundo, si deseamos, de hecho, emprender una guerra contra la guerra, tendremos que comenzar por los niños. Si ellos crecen en su inocencia natural, no tendremos que luchar, no tendremos que enseñar infructíferas resoluciones inútiles, sino que iremos de amor en amor y de paz en paz, hasta que finalmente los más alejados rincones del mundo se revistan de aquella paz y de aquel amor de los cuales, consciente o inconscientemente, el mundo está hambriento.”
Mahatma Gandhi (RevistaYoung India, 19 de noviembre de 1931).
¿Pero qué es la violencia? ¿A qué hacen referencia las tres acepciones de violencia que definió el padre de los estudios de paz, Johan Galtung: directa, estructural y cultural? ¿A cuál de las tres se enfrenta la noviolencia? ¿Qué transformación necesitamos? Si, tal como dijo Gramsci, cuando el viejo mundo se muere, el nuevo tarda en aparecer, y en ese claroscuro surgen los monstruos, ¿cuáles son los monstruos de nuestro tiempo, son nuevos o fantasmas del pasado?
En estas breves líneas pretendo dibujar un espacio de reflexión comprometido con la búsqueda de caminos donde construir las paces. Intentaré dar breves aproximaciones a las preguntas antes mencionadas, con el fin de honrar la memoria de alguien que fue tan valiente que apostó siempre por la paz: Mahatma
Gandhi. Murió asesinado el 30 de enero de 1948 en Nueva Delhi.
Leer el documento completo en PDF: BNC 314