Noticias y Comunicaciones nº 327

¿Qué características tiene la maldad?

La maldad humana existe y se caracteriza por buscar en todo momento el propio beneficio. En principio el ser humano está orientado biológicamente hacia la sociabilidad, hacia la empatía y el cuidado de los suyos. De esta manera sobrevivimos como grupo y avanzamos como especie. Pero hay algo que también sabemos: la maldad humana existe. A lo largo de la historia hemos conocido asesinos en masa y también a esos que fueron perpetradores del mal, personajes que impulsaron a otros a cometer violentos crímenes. Ahora bien, la maldad es sibilina, silenciosa y a menudo no tan llamativa como las dramáticas historias que nos dejaron estos nombres ya míticos en la literatura de lo criminal. Porque si hay algo que todos sabemos es que el mal se aprecia también en ciertas figuras más cercanas: en directivos de empresa, en las esferas políticas, en esos padres o esas madres que maltratan a sus hijos y hasta en esos niños que acosan, humillan y agreden a sus compañeros de clase. Los neurólogos, psiquiatras y psicólogos se han preguntado siempre si no puede existir un eje común que explique buena parte de esos comportamientos. Parece ser que sí. De hecho, en 2018, una investigación de científicos daneses y alemanes identificaba el origen común de la maldad humana. Le llamaron Factor D o «factor oscuro de la personalidad». Los seres humanos con sobreabundancia de Factor D piensan solo en ellos mismos y no les importan las consecuencias de sus acciones, malintencionadas o el daño que puedan infligir a los demás. Los hay que llegan a disfrutar con los perjuicios que causan a los demás.

Leer el documento completo en PDF: BNC 327

Horeb Octubre 2022

SUMARIO

  • Editorial – J. Álvaro Ricas Peces – Pág. 3.
  • Espiritualidad evangélica – Juntos podemos iluminar el mundo. – Julia Crespo Benito. – Pág.6
  • El hermano Carlos habla… – José Luis Vázquez Borau. – Pág.9
  • POEMA – Pedro Casaldáliga – Pág. 11
  • ORACIONES. – Pág. 14-16

Descargar en PDF: Horeb Octubre 2022

Noticias y Comunicaciones Nº 326

«Dichosas las personas que creen sin ver»
a propósito de Teresa de Lisieux

Para encontrarse con Dios hay que buscarlo. Esto es importantísimo sin que ello suponga que la búsqueda y el deseo funden y den entidad a la realidad deseada. Se busca y desea porque la realidad, existente independientemente del deseo, provoca el deseo. Por ello, la presencia o la ausencia del deseo de Dios marca una diferencia fundamental. Quien no desee la libertad o la fraternidad, difícilmente las buscará. Y si se encuentra con ellas, difícilmente las va a reconocer en lo que son. Lo normal es que tienda a interpretarlas más allá o más acá de ellas mismas. La dureza de la realidad, se podrá sostener, hace imaginar o fantasear tales ideales inalcanzables o es una herencia de un periodo infantil o mitológico de la humanidad.

Leer el documento completo en PDF: BNC 326

Noticias y Comunicaciones n° 324

El silencio es nuestro gran enemigo, pues nos lleva a nuestros interrogantes y a nuestras verdades más íntimas. Es por esto que no queremos escucharlo. Sin el silencio interior no podemos escuchar a Dios y no podemos reconocer su presencia en nuestra vida. Sin el silencio interior no podemos crecer como personas ni como creyentes. San Bernardo, refiriéndose a un teólogo le dice: «Árido es todo el alimento del alma si no es rociado con este aceite; es insípido si no se sazona con esta sal. Lo que escribes no tiene sabor para mí, si no leo en ello a Jesús». Y afirma: «Solo Jesús es miel en la boca, cántico en el oido, júbilo en el corazón».

Se entiende por espiritualidad una existencia religiosa comprometida.

El elemento más importante de la espiritualidad es el compromiso de fe de una existencia con Dios. Se trata de una experiencia, de un entendimiento y una comprensión de la relación con Dios, así como una actitud ética que gobierne la vida de la persona. De esta manera podemos decir que hay una espiritualidad hindú, budista, judía, musulmana y cristiana.

La espiritualidad cristiana es la forma en que una persona, que está animada por la presencia viva y por la acción del Espíritu de Cristo, reacciona y actúa habitualmente de acuerdo a Él. De esta forma la espiritualidad cristiana abarca toda la persona humana (cuerpo, alma, espíritu). Para San Pablo una persona es espiritual, cuando todo su ser y toda su vida están or-
denados, dirigidos e influenciados por el Espíritu de Dios (1 Cor 2,12, 14) por su aliento, que es vida. Actualiza el espíritu de Jesús.

Hay que entrar en lo profundo de nosotros mismos, donde reina el silencio, para encontrarse con el Maestro interior: Cristo Jesús, en quien reconocemos «la imagen visible del Dios invisible» (1 Col1,15). Por medio de Él vislumbramos tanto lo que es Dios como lo que estamos llamados a ser. El cristiano es aquel que vive de la luz de Cristo y es el mismo parte de esa luz, lo que comporta una gran responsabilidad social. El encuentro con Cristo no nos aparta de la tarea de transformar el mundo, sino que nos empuja a un compromiso cósmico e histórico sir reserva. (JLVB)

PDF: BNC 324

Noticias y Comunicaciones, n° 322

DIOS ES INFINITAMENTE MÁS QUE PADRE Y MADRE

El Padrenuestro es mucho más que una oración de petición. Es un resumen de las relaciones de un ser humano con el absoluto, consigo mismo y con los demás. Es muy probable que el núcleo de esta oración se remonte al mismo Jesús, lo cual nos pone en contacto directo con su manera de entender a Dios. El Padrenuestro nos trasmite, en el lenguaje religioso de la época, toda la novedad de la experiencia de Jesús. La base de ese mensaje fue una vivencia única de Dios, que no tuvo más remedio que expresar en el paradigma de su cultura.

Leer número completo en PDF: BNC 322

Boletín Horeb-Ekumene, julio-agosto 2022

Sumario

  • Editorial – J. Álvaro Ricas Peces. – Pág. 3
  • El hermano Carlos habla… – José Luis Vázquez Borau. – Pág. 7
  • Espiritualidad evangélica – Julia Crespo Benito. – Pág. 4
  • Textos para la reflexión
    • Jacques Maritain – Pág. 9
    • Thomas Merton – Pág. 10
    • WU WEI – Pág 11
    • Omraan Mikhaël Aïvanov – Pág. 12
  • Oraciones – Pág.13

Ver la publicación completa en PDF: Horeb Julio-agosto 2022

Noticias y Comunicaciones n° 320

“Las dimensiones bautismal, pastoral y local, son tres perspectivas ecuménicas importantes en el camino hacia la plena comunión”, este es el centro del discurso del Santo Padre a los miembros de la Comisión Mixta Internacional para el diálogo teológico entre la Iglesia católica y las Iglesias ortodoxas orientales, a quienes recibió en audiencia este 23 de junio, en el Vaticano.

Ver publicación completa en PDF: BNC 320

Noticias y comunicaciones Nº 319

El Patriarca Ecuménico Bartolomé y el Papa Francisco representan un enfoque unido y una voz profética sobre la relación inseparable entre la sostenibilidad del planeta y la salvación del mundo, entre la protección del medio ambiente y la realización de la fraternidad universal. Gracias a sus constantes recordatorios, la conciencia de las comunidades católica y ortodoxa ha crecido, dando lugar a acciones y reflexiones comunes. Un ejemplo de ello es la V Cumbre de Halki, inaugurada en Estambul, un evento organizado conjuntamente por el Patriarcado de Constantinopla y el Instituto Universitario Sophia, expresión del Movimiento de los Focolares.

Saludo y oración del Papa Francisco

Participan estudiantes y profesores católicos y ortodoxos de todos los continentes. “Apoyar juntos el futuro del planeta”, el título. Por parte de la Santa Sede, está presente Monseñor Angelo Vincenzo Zani, del Dicasterio para la Cultura y la Educación. Firmado por el Secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, llega un mensaje del Papa Francisco a los participantes en el que dice estar “complacido de ser informado sobre la conferencia”. Está dirigida a Monseñor Piero Coda, codirector de la Cátedra Ecuménica Patriarca Atenágoras-Chiara Lubich de Sophia. “Mientras nuestra casa común se enfrenta a los continuos efectos del cambio climático, que amenazan especialmente a nuestros hermanos y hermanas más vulnerables -se lee en el mensaje – Su Santidad reza para que una respuesta ecuménica cada vez mayor a la llamada a ser buenos administradores del don de Dios de la creación inspire a muchos a comprometerse con este fin por el bien de las generaciones futuras”.


Leer el número completo en PDF: BNC 319