La Cuaresma que estamos celebrando nos invita a emprender un viaje hacia el interior de nuestro ser, donde mora el mismo Dios. Durantes estas semanas, el creyente busca un “tiempo
de desierto” y de silencio en el que recogerse lejos del ruido diario que sofoca el aliento del espíritu. La experiencia de la Comunidad ecuménica Horeb – Carlos de Foucauld, que aquí nos acerca su fundador y moderador, es un buen ejemplo de que la oración, la acogida, la escucha… siguen reclamando y teniendo su espacio en la era de la globalización.
Lee el documento completo (PDF): En busca del silencio interior. José Luís VÁZQUEZ BORAU