«No la podemos dormir, la Noche Santa,
no la podemos dormir»
Así reza el villancico.
La Liturgia reza así:
Nos ha nacido un Hijo.
se nos ha dado un Niño
para que lo hagamos crecer
hasta la plenitud.
Un Niño que viene de las profundidades del Misterio,
para que sepamos acoger a toda criatura humana.
Para que sepamos acoger a toda criatura.
Para que sepamos que todos pervtenecemos
a la gran familia amada de Dios.
Es Navidad. Es tiempo nuevo.
Nos viene pequeño, en una impotencia total, como los «Aylan» del Reino.
Para que nuestra opción siga siendo por los pobres de la tierra.
La Iglesia debería renovar en Navidad su compromiso
de vivir la encarnación del Verbo día a día.
Es Navidad. Es tiempo nuevo.
No podemos dormir la Noche Santa.
Debemos despertarnos para acoger a los pobres de la tierra,
los pequeños del Reino.
Debemos vivir cada día la Noche Santa del Reino.
Pedro Casaldáliga