CARTA DE CONVOCATORIA PARA LA XII ASAMBLEA MUNDIAL

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CARTA DE CONVOCATORIA PARA LA XII ASAMBLEA MUNDIAL DE LA FRATERNIDAD SACERDOTAL IESUS CARITAS
BUENOS AIRES, ARGENTINA, 6 AL 21 DE MAYO DE 2025

Querido hermano:

En un mundo desgarrado por las guerras y herido por el sufrimiento de los inocentes, especialmente de los ancianos, las mujeres y los niños, el Papa Francisco ha alzado su voz profética innumerables veces para recordar a la humanidad una verdad esencial del Evangelio: «TODOS SON HERMANOS» (Mt 23,8). Ha llevado a cabo con esmero actividades significativas, tanto dentro como fuera de la Iglesia, con cristianos y no cristianos para lograr la anhelada fraternidad universal y la paz mundial.

Nosotros, discípulos de Jesús de Nazaret, inspirados por el testimonio de San Carlos de Foucauld, que hizo de la FRATERNIDAD UNIVERSAL el núcleo y el horizonte de su vida en Dios, queremos dar una contribución significativa a esta causa, tanto dentro de nuestros presbiterios como en la sociedad civil de la que formamos parte. Por eso, el tema de nuestra Asamblea es: SACERDOTES DE IESUS CARITAS: TESTIGOS Y FORJADORES DE LA FRATERNIDAD SACERDOTAL Y UNIVERSAL.

En el anexo adjunto se encuentra el Cuestionario que el Responsable Nacional debe responder con amable atención y los principales temas que marcarán la dirección y el proceso de nuestra reunión.

Nuestra Asamblea se llevará a cabo en la Casa de Ejercicios Espirituales Monseñor Aguirre, Santa Rosa 2341, B 1644, ciudad de Victoria, Provincia de Buenos Aires, Argentina (la casa está a una hora del centro de Buenos Aires). Su costo aproximado es de US$600 o 560 Euros.

¿Quiénes son los participantes?

De acuerdo con nuestros Estatutos (Art. 19), están invitados a participar en la Asamblea con derecho a voz y voto:

  1. el Responsable Internacional y su equipo,
  2. los dos Responsables Internacionales que le precedieron,
  3. los cuatro Responsables Continentales y sus Equipos,
  4. el Responsable Nacional de los diferentes países,
  5. algunos delegados invitados específicamente por el Responsable Internacional y su equipo.

Para ingresar a Argentina, los ciudadanos de algunos países requieren una visa. Haga clic en www.migraciones.gov.ar/accesible/indexdnm.php/visas), descargue el formulario de registro y complételo. Envíe una copia escaneada de su pasaporte con su dirección e información de contacto1 a Tino (robertoferrarilujan@gmail.com) para la carta de invitación. Estos documentos deben tramitarse con suficiente antelación para que podamos seguir disfrutando de tarifas aéreas más baratas. Muchas gracias.

Mantengamos esta Asamblea cerca de nuestros corazones en la oración, para que dé los frutos que el Espíritu nos ha llamado a hacer y a ser en nuestro tiempo. Confiamos humildemente las aspiraciones comunes y los planes concretos de nuestra Asamblea por intercesión de nuestro hermano San Carlos de Foucauld.

En Jesús Cáritas,
Eric, Matthias, Honoré, Tony y Fernando
Equipo Internacional.
Junio 2024

1 La información de contacto es una recopilación de información; a saber, nombre de residencia y/o lugar de trabajo, su dirección; naturaleza de su trabajo; número de teléfono de residencia/lugar de trabajo; Su número de teléfono móvil personal


Leer en PDF:

1. CARTA DE CONVOCATORIA PARA LA XII ASAMBLEA MUNDIAL

2. ANEXO A LA CARTA CONVOCATORIA

3. Hoja de inscripción para la Asamblea Mundial.Argentina

Fraternidad Sacerdotal Iesus Caritas. Aurelio SANZ BAEZA

Un descubrimiento: el hermano Carlos

Un día leímos algo sobre Carlos de FOUCAULD. De alguna manera nos llamó la atención su forma de vivir el evangelio. Fuimos descubriendo cómo su testimonio de vida fue realmente sorprendente. A través de los libros de René VOILLAUME, de Carlo CARRETO, de Jean-François SIX, o Arturo PAOLI, una línea de espiritualidad y de acción se abría ante nosotros. Pudo ser la palabra o la invitación de algún compañero para participar en un retiro de oración, a una reunión de otros sacerdotes, o un artículo de alguna publicación donde se hablaba de un hombre enamorado de Jesús, que cambió su vida de rico para ser pobre; un hombre con un sentido de fraternidad universal y lleno de Dios, o unos hermanitos y hermanitas, o sacerdotes, que seguían un estilo de ser cristianos desde lo sencillo, el trabajo, estar con los pobres sobre todo, hombres y mujeres encarnados en la realidad de su entorno. Quizá en la época de estudiantes nos llamó la atención que, entre tanta teología, había una manera directa de conocer a Jesús, desde un hombre que, sin ser de nuestro tiempo, se adelantó al Vaticano II y tuvo unas intuiciones que más adelante se hicieron realidad, en su vida y en la vida de muchos cristianos que contemplamos este mundo como una maravillosa obra de Dios, donde los seres humanos debemos vivir la fraternidad universal. Somos sacerdotes diocesanos y llamados a ser Iglesia, sin rasgos sectarios o de elegidos especiales para algo glorioso: llamados a ser también hermanos universales.

La espiritualidad de Nazaret

El hermano Carlos quizá nos abrió un camino distinto en la fe; no el único, pero sí al que Dios nos llama a cada uno, tal y como somos, sin la frustración de no ser de otra manera, mejor o más perfecta. Esto no nos hace estar por encima de otras formas de espiritualidad, sino acercarnos a Jesús allí donde está, en convivencia con quienes tenemos cerca, en donde vivimos, con quienes nos encontramos cada día. Nazaret es estar con la gente, no vivir al margen de nadie. Nazaret es trabajar como uno más, o estar enfermo como otro enfermo, o ser jubilado como tantos jubilados. Es sonreír con quienes ríen y llorar con los que lloran. Sin empatía no podemos entender qué es Nazaret y entender qué nos traen los acontecimientos sencillos o lo pequeño de cada día. A veces a los sacerdotes nos cuesta trabajo vivir en ese estilo, o tener una actividad pastoral sin pensar en el éxito; el clericalismo está muy lejos de Nazaret, como lejos está Nazaret del templo de Jerusalén… Por eso no tenemos que sentirnos fracasados si acude poca gente a las reuniones de la parroquia, o en el templo hay mayoría de personas mayores o muy poca afluencia de creyentes. Vivir Nazaret es llevar a Jesús de vecino en el barrio, el pueblo, la calle, donde se reúne la gente, en los hospitales, la cárcel, los centros de acogida, participar de las esperanzas de los refugiados o desplazados. Puede ser difícil de entender si queremos conservar nuestras seguridades personales o posibles privilegios sociales.

El Mes de Nazaret nos ayuda, al menos una vez en la vida, a vivir en fraternidad este espíritu del hermano Carlos, profundizando en su vida y su legado, compartiendo nuestras vidas y realidades al orar juntos, trabajar en algo manual – sin jugar a ser obreros por un día – , revisando nuestras vidas, alegrías y fracasos, dando al desierto su tiempo, como búsqueda y encuentro con el silencio de Dios, haciendo juntos las tareas de cualquier hogar, aunque en este caso sea un hogar de solteros. En el Mes de Nazaret hacemos nuestro compromiso en la fraternidad, que es compromiso a vivir el evangelio y seguir a Jesús, donde él nos ponga.

Una entrega a los más pobres

Rompiendo esquemas de tradición familiar y social, Carlos de FOUCAULD, después de sus búsquedas de Dios, optó por ser pobre como Jesús. Cuando uno se enamora quiere escuchar el corazón de la otra persona. El hermano Carlos se identificó con su Bien Amado Jesús yendo hacia los más abandonados.

Dice Florencio ROSELLÓ, arzobispo de Pamplona, España, en la Jornada Mundial de los Pobres 2024: “En esta Jornada de los Pobres me surge siempre una duda: ¿cuando hablamos de los pobres, en quién pensamos? A veces veo que son gente dependiente de mi “limosna”, gente dependiente de mi actitud, gente que está por debajo de mí, que me mira hacia arriba, y yo le miro hacia abajo. Me siento superior a él, y eso me molesta. Siempre he querido tratar a los pobres de igual a igual, mirarle a los ojos, porque estoy a su misma altura, no de arriba abajo, como si yo fuese el bueno y él…piense usted lo que quiera”. Igual nuestro Papa Francisco insiste siempre en esto, y, aún más, hay que tocar al pobre, darle la mano, o abrazarlo, que no nos dé repugnancia, ni pensemos que nos vamos a manchar.

Carlos de FOUCAULD fue más allá: hay que estar con ellos, vivir con ellos, según su estilo, sin diferenciarnos por nuestro status religioso que a veces es clasista y clerical, hasta incluso si somos de la clase media. Los pobres no entienden de títulos universitarios: entienden a quienes son como ellos, y se acercan sin tener miedo o prejuicios. Hay muchas formas de pobreza a nuestro alrededor, y no sólo la pobreza material: pobres que no tienen un corazón libre, pobres que carecen de amistad, pobres saturados de tecnología y faltos de humanidad… Vivimos muchas veces en medio de ellos, y no hace falta ir muy lejos. Países pobres con deuda externa – y eterna – con Occidente, inmigrantes en malas condiciones: todos los rechazados por la riqueza. ¿Cómo ser coherentes en nuestro estilo de vida con un mundo lleno de injusticias? La fraternidad nos hace ver también la pobreza de nuestras propias miserias.

Compartir la fe y la vida

La vida de una fraternidad sacerdotal Iesus Caritas es la vida de unos hombres creyentes que siguen a Jesús y se ayudan a ser fieles al evangelio. En el encuentro de cada mes – en la fraternidad local – ,en el retiro anual o trimestral, en las asambleas, y en la vida de cada día, allí donde uno está, se renueva ese encuentro con Jesús en la adoración, el tiempo de silencio y contemplación de la Eucaristía, sin prisas. Jesús, que nos mira y nos acoge. Jesús, que nos escucha y comparte nuestro silencio y nuestros ruidos. Para que haya amistad con Jesús, tenemos que acercarnos a él. El hermano Carlos y los grandes orantes a través de la Historia nos dan testimonio de esta amistad profunda con Dios.

Y en el desierto, otro tiempo prolongado de estar a la escucha, la amistad se fortalece, como se fortalece el amor hacia la persona que echamos de menos porque no está a nuestro lado. No vemos a Dios, pero lo sentimos, porque él nos está buscando.

Puede ser que nos dé miedo la soledad, o encontrarnos con nosotros mismos, con nuestra realidad vulnerable. En la Oración de Abandono decimos “con infinita confianza”… Cuando hay confianza, se van los miedos. Para el desierto no necesitamos prácticamente nada: sólo nosotros. No necesitamos un templo o una capilla, ni libros, ni Biblia, ni un paisaje agradable o con comodidades: hay que salir hacia donde Dios nos conduzca. Silencio…

La vida de fraternidad es compartir la vida, tal y como es, en cada encuentro, especialmente en la revisión de vida. Carlos de FOUCAULD no revisaba su vida porque no tenía una fraternidad de cristianos como él. Ahondando en la amistad con la gente con quien vivió, animado por la dirección espiritual del P. Henry HUVELIN, desde la distancia entre Francia y Argelia, y antes en sus diversas etapas de búsqueda, el hermano Carlos tuvo una permanente revisión de vida, en la oración, en sus cartas, que le llevó a no estar cómodo e instalado en unos planes ya hechos: siempre estuvo abierto a la realidad de la vida y de las circunstancias. En la fraternidad vivimos la revisión de vida como un medio para el crecimiento interior, escuchando y siendo escuchados, Es necesaria la confianza mutua, la aceptación de los demás, con su forma de ser, a veces con ideas distintas sobre la Iglesia y la sociedad. El diálogo, el encuentro en clima de oración, hacen caer prejuicios y juicios hacia los demás. Por eso es imprescindible, para una verdadera revisión de vida, la transparencia del interior de cada persona. No hay que revisar actividades pastorales, hay que revisarse a uno mismo. Los demás nos ayudarán. Y, sobre todo, sentirnos en libertad, sin puertas cerradas.

En el proyecto de Jesús

La fraternidad sacerdotal Iesus Caritas es una pequeña parte del conjunto de la Iglesia de Jesús, una pieza más del todo por el cual vivió Jesús: ovejas responsables de otras ovejas que no miran desde el poder. Nos sentimos en comunión con el Papa Francisco, que tiene a San Carlos de FOUCAULD siempre presente en sus encíclicas, y queremos ser Iglesia en salida, en las periferias, para seguir descubriendo a Jesús y trabajando por su Reino, necesitados de los demás y al servicio de los que no son protagonistas de éxito. Evangelizar siendo contemplativos y dejarnos evangelizar.

Aurelio SANZ BAEZA,
fraternidad de Murcia, España

(Gracias, Quico, por los dibujos)


📑 Descargar el documento en PDF: Fraternidad Sacerdotal Iesus Caritas. Aurelio SANZ BAEZA – es

Horeb Ekumene, febrero 2025

SUMARIO:

EDITORIAL
04 – La Eucaristía prolongación de la encarnación

EKUMENE
06 – Jornada abierta con el arzobispo cardenal de Rabat, en Bilbao
08 – Peregrinos y sembrador de esperanza. 29º jornada de la vida consagrada

HOREB
10 – Vivir nuestra misión como fuente de plenitud
14 – Meditando los escritos de Carlos de Foucauld
15 – Camina Jesús en su incansable caminar
17 – La era contemplativa. Nueva era e mistica cristiana
19 – Calendario pluricultural


📑 Leer el documento completo en PDF: Horeb-Ekumene-Febrero-2025-N377

Mensaje de Año Nuevo 2025, Carlos Roberto

A los hermanos de la Fraternidad en las Américas

Finalizando el año 2024, es momento de mirar lo que vivimos y cómo vivimos, de corregir lo que no funcionó y planificar una mejor manera de vivir, de ser felices, de ser testigos de nuestra fe y colaborar en la construcción de un mundo justo y fraterno.

Algunas preguntas a hacerse: ¿Gastamos nuestra vida para hacer que el mundo nuevo suceda, donde prevalece el proyecto de amor, paz y justicia que nuestro amado hermano Jesús nos pide? ¿Colaboramos con fidelidad en la organización, participación y dinamismo de nuestras fraternidades, presentes en los diversos países de nuestra querida América? ¿Hemos sido solidarios con los presbíteros que están en nuestra fraternidad local, y con el presbiterio del que formamos parte? Cada uno hará su propia evaluación.


📑 Leer documento completo en PDF: Mensaje de año nuevo 2025

Horeb Ekumene, 376, enero 2025

Los líderes de las Iglesias piden que la tregua entre Israel y Hezbollah se extienda a la Franja de Gaza

“En medio de estos días oscuros, de conflictos constantes e incertidumbre en la región, nosotros, los patriarcas y jefes de las Iglesias de Jerusalén, nos mantenemos firmes en proclamar el mensaje eterno de Navidad, de la Verdadera Luz que brilla en la oscuridad: el nacimiento de Nuestro Señor Jesús en Belén.”

Es el mensaje conjunto de los patriarcas y jefes de las Iglesias de Jerusalén para estas Navidades. En el contexto de la guerra en Gaza y el alto el fuego en el sur del Líbano, el mensaje anima a honrar al Niño Dios trabajando por la paz y la reconstrucción, y pide el retorno de los cautivos y la devolución de lo injustamente incautado.

«Damos gracias al Todopoderoso por el reciente alto el fuego entre dos de los bandos en conflicto en nuestra región, y pedimos que se extienda a Gaza ya muchos otros lugares»

El mensaje también recuerda que, a pesar de las guerras e injusticias, “el nacimiento santo de Nuestro Señor Jesucristo desató una revolución espiritual que sigue transformando numerosos corazones y mentes hacia los caminos de la justicia, la misericordia y la paz”.


📑 Leer documento completo en PDF: Boletin nº 376- 1 de enero de 2025

Carta de Navidad 2024 de Eric

Carta de Navidad a los hermanos de todo el mundo 2024

«¡Grita de alegría, oh hija de Sión! ¡Canta con alegría, oh Israel! ¡Alégrate y regocíjate con todo tu corazón, oh hija Jerusalén! El Señor… está en medio de ti, no tienes más desgracia que temer». (Sof. 3:14-16.)

Queridos hermanos:

Un cordial saludo de alegría y esperanza para vosotros en el espíritu de un Dios humilde que vive entre nosotros!!

¿Cómo está todo el mundo? ¿Qué regalos significativos estás celebrando en este momento? Sería bueno que todos hiciéramos una parada decisiva, hiciéramos una revisión general de la vida, tanto personal como comunitaria, y escucháramos con atención las invitaciones del Emmanuel, el Dios de las sorpresas. Mientras contemplas amorosamente el pesebre, lleva tu propia pobreza ante el Niño Dios y comienza a ver de nuevo con renovado asombro el Misterio. Que la pobreza de Dios hable de vuestra propia pobreza. Su humanidad divina restaura nuestra humanidad a su bondad original. Su humilde divinidad despoja a nuestra humanidad hasta sus cimientos para que pueda ser un recipiente estimable de divinidad. Todo esto es una iniciativa benévola de Dios. Junto con el salmista, solo podíamos decir: «Para siempre, cantaré la bondad del Señor». El alcance y la calidad de nuestra vida humana en este mundo no es más que nuestro humilde agradecimiento a este gran regalo.

Ahora que tengo el privilegio de conocer a muchos de ustedes en persona, tengo a varias personas cerca de mi corazón mientras escribo esta carta. Me pregunto cuáles son sus experiencias de alegrías, luchas y esperanzas durante este momento kairós de la Navidad. Mis pensamientos están con nuestro hermano Carlos Roberto en su lugar de sanación y recuperación en Brasil, con la comunidad de mujeres y niños desplazados de Aurelio en Burkina Faso, con el compromiso de Kuno con las mujeres prostituidas en Alemania, con Juan Baraza en las periferias de Chile. Me refiero a nuestros hermanos que viven como minoría en una población dominada por musulmanes en Asia, a nuestros hermanos en África que viven en medio de una trágica pobreza y violencia, a nuestros hermanos en Europa que acogen a los migrantes desplazados causados por la guerra en Ucrania. Me pregunto qué es lo que les da gozo y paz en este momento. ¿Dónde está la esperanza para ellos? ¿Y qué decir de nuestros hermanos que viven en el silencio de la vejez y de la fragilidad, o de nuestros hermanos en las periferias de sus diócesis?

Atravesando las realidades multifacéticas de nuestro tiempo, los invito a caminar con el Papa Francisco mientras medita con nosotros sobre el amor humano y divino del corazón de Jesús en su última encíclica, Delixit Nos. Para él, hay una mayor necesidad de redescubrir la importancia del corazón, la parte más íntima de nuestro ser, el lugar de nuestros deseos y el lugar donde se toman las decisiones importantes. Nos preguntamos: ¿tenemos un corazón que busca conocer y comprender el significado más profundo de la vida y llevar a la unidad las polaridades conflictivas, los dilemas morales y las paradojas del tiempo presente? Una persona sin corazón es fría, insensible a las realidades del otro y vive vidas muy indiferentes y superficiales. Se precipitan «frenéticamente de una cosa a otra sin saber realmente por qué, y terminan como consumidores insaciables y esclavos de los mecanismos de un mercado despreocupado por el sentido más profundo de nuestras vidas». (#2)

Hay una forma de vivir y responder a las realidades de nuestro tiempo que viene del corazón, con un corazón. En el párrafo 179, el Papa Francisco propone a San Carlos de Foucauld como un icono para la humanidad contemporánea en su búsqueda de sentido y autenticidad. En su vida, el hermano Charles «trató de imitar a Jesús viviendo y actuando como él lo hacía, en un esfuerzo constante por hacer lo que Jesús habría hecho en su lugar. Sólo conformándose a los sentimientos del corazón de Cristo podría alcanzar plenamente esta meta». En el hermano Carlos, la imitación de la vida y de la acción de Jesús, que comienza como un simple deseo, se convierte en una resolución diaria, en un esfuerzo constante por hacer siempre en referencia a lo que Jesús habría hecho. Se convierte en un examen diario de la mente y del corazón, marcado por un compromiso firme y progresivo de ver como Jesús ve, de hacer lo que Jesús haría, de vivir su vida como Jesús viviría. Es un morir diariamente a sí mismo de un discípulo y de una constante conformidad de su propio ser con el de Jesús.

Después de haber sido conformado en mente y corazón a Jesús, el Hermano Charles desea llevar a los demás el mismo amor por Jesús que él personalmente experimentó. «Su camino misionero a los más pobres y olvidados de nuestro mundo, lo llevó a tomar como emblema las palabras «Iesus-Caritas», con el símbolo del corazón de Cristo coronado por una cruz». Estos dos movimientos en la espiritualidad del Hermano Carlos, a saber; acoger a Jesús y entregar a Jesús a nuestro mundo hoy son como los 2 movimientos del ciclo cardíaco del corazón humano. El corazón bombea sangre poco oxigenada a los pulmones a través de sus cavidades superiores y el corazón bombea sangre ricamente oxigenada desde los pulmones a través de sus cavidades inferiores al resto del cuerpo. Para el hermano Charles, acoger o imitar a Jesús es ser un discípulo con el corazón y la mente de Jesús. El discipulado no es el fin en sí mismo, sino que naturalmente se desborda y esencialmente califica la misión: llevar el amor de Jesús a los más pobres de este mundo con el corazón de Jesús que lo consume. «Con todas mis fuerzas trato de mostrar y demostrar a estos pobres hermanos perdidos que nuestra religión es todo caridad, toda fraternidad, y que su emblema es un corazón». Este deseo convertido en martirio cotidiano lo convirtió poco a poco en un «hermano universal». Dejándose plasmar por el corazón de Cristo, trató de acoger en su corazón fraterno a toda la humanidad que sufría: «Nuestro corazón, como el de Jesús, debe abrazar a todos los hombres».

Así que aquí estamos, discípulos misioneros de Jesús de Nazaret tras las huellas de San Carlos de Foucauld, como profesamos en Cebú en 2019. Que seamos levadura en la masa de nuestra humanidad rota pero restaurada a la bondad original. Juntos, caminamos como compañeros peregrinos de esperanza que, en el centro mismo de nuestro viaje terrenal, volvemos al diseño original del Creador de que un grano de trigo que cae a la tierra y muere, da mucho fruto para el Reino.

Tu hermanito,

Eric


PDF: Saludo de navidad 2024